La Organización Zonal Indígena del Putumayo y las 149 comunidades de los 11 pueblos indígenas filiales Coreguaje, Murui, Siona, Yanacona, Kamentsa, Misak, Inga, Pasto, Kichwa, Pijao y Quillasinga procedemos a declarar ante la comunidad Internacional y al Pueblo Colombiano nuestro apoyo en unidad desde el territorio Amazónico como respaldo a la gran minga nacional que hoy reúne a los Pueblos Indígenas de Colombia y sectores sociales afectados por la continuidad de la violencia y la renuencia a una implementación Integral de los Acuerdos de Paz; decisión que se realiza ratificando el justo reclamo de una política en defensa de la vida, el territorio, la paz, la pervivencia de los Pueblos Indígenas y la dignidad de las comunidades afrodescendientes y campesinas, quienes hoy nos unimos como respuesta a la existencia de una grave crisis Humanitaria en materia de garantía de nuestros derechos fundamentales y territoriales.
Señalamos que la amenaza del COVID-19 es tan solo una de miles de amenazas que afrontamos los pueblos indígenas para pervivir, amenaza que dada la renuencia institucional para reconocer nuestros valores y cosmovisiones ancestrales hemos debido combatir desde la medicina tradicional y los esfuerzos propios mediante la guía y sabiduría ancestral de nuestros mayores y mayoras, con el fin de avanzar en la búsqueda de una salud Integral que tenga en cuenta el cuidado del ser humano, la madre tierra y el territorio Amazónico en su integralidad como fuente de vida para la humanidad; por este motivo nos sumamos a la solicitud y exigencia de sentar un Dialogo Nacional que permita el desmonte de las actuales políticas de “desarrollo” y la respuesta gubernamental a las graves pandemias que azotan a nuestros Pueblos como lo son: el desarrollo a gran escala y sin una debida consulta de obras de infraestructura en la Selva Amazónica, la entrega de los territorios a multinacionales y empresas agroindustriales y la continua vulneración a nuestros derechos territoriales por actores armados de diversa índole quienes aprovechando la desidia gubernamental para brindar condiciones de dignidad en materia de salud, economía propia, territorio, educación y dignidad insisten en sembrar guerra y destrucción como
alternativa para familias y madres que continúan un doloroso parto de sus hijos para la continuación de una guerra ajena y fratricida.
Reiteramos que las actuales condiciones sociales y políticas de Colombia hacen necesario solicitar de carácter urgente a la comunidad internacional y Organizaciones No Gubernamentales la intervención humanitaria y mediación con el fin de superar el actual estado de cosas que amenazan el exterminio de los pueblos indígenas y los sectores sociales históricamente violentados por el colonialismo, en este sentido, instamos a HUMAN RIGHTS, CRUZ ROJA, ACNUR, ONU y la Unión de la Naciones que luchan por la erradicación de la pobreza y la discriminación estructural para que garanticen la integridad de los Mingueros y garanticen el Gran Dialogo Nacional que permita enfrentar una de las crisis humanitarias más graves de las últimas décadas que para el Departamento del Putumayo amenaza el exterminio de los Pueblos Indígenas y la desaparición de la Selva Amazónica.
Teniendo en cuenta las anteriores consideraciones la Organización Zonal Indígena del Putumayo- OZIP fundamentada en los mandatos Ancestrales que instan a exigir la participación de las comunidades indígenas en las instancias del Orden Nacional con el fin de velar por la Pervivencia de los Pueblos y el territorio ratifica el respaldo en UNIDAD a la Gran Minga Nacional y en consecuencia procede a Declarar la Asamblea Permanente Organizativa de los Pueblos Coreguaje, Murui Muina, Siona, Yanacona, Kamentsa, Misak, Inga, Pasto, Kichwa, Pijao y Quillasinga del Departamento del Putumayo.
POR LA VIDA, EL TERRITORIO, LA CULTURA Y LA AUTONOMÍA ORGANIZACIÓN ZONAL INDÍGENA DEL PUTUMAYO – OZIP VIVA LA MINGA NACIONAL
2020
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